Tantas veces han llorado mientras los labios al mismo tiempo han sonreído. De todas las partes del cuerpo son las menos y las más hipócritas. Han mirado con odio, cuando rabía el corazón ha sentido. Sus pupilas han brillado ante los destellos de la felicidad y el cariño. Con compasión al desvalido han observado y con tentación al ser que excita los sentidos. Pero también se han enfocado en los paisajes prohibidos. En las calientes escenas de los teatros fríos. En la mirada ajena de la aventura discreta y en la conducta que no ha de importar de los vecinos. No sé sí en realidad son los espejos del alma, pero al menos son una ventana hacia lo enigmático, hacia lo conocido. "Ojos que no ven, corazón que no siente" ¿Verdad o falsedad, esto que dice la gente?. Ni idea... pero que lindo fuera que los ojos jamás mintieran.
Por (Js) - Javier Suárez
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