lunes, 20 de julio de 2009

Independencia de Colombia a más de 3 mil Km de distancia

lunes, 13 de julio de 2009

Solterón sí, pero aquello no



En un solo día, tres personas se preguntaron  con respecto a mí: ¿por qué yo, siendo medio inteligente, medio simpático, medio joven, estaba aún soltero?  Esa misma inquietud  me la habían expresado antes otras amistades.  El perseverante interrogante sobre mi soltería, me hizo sentir más sólo que nunca ese día, y me fui a tomar una cerveza (no bebo) pero quería como cambiar un poquito la rutina y visité una barra  muy conocida en West New York, ciudad de New Jersey.

Disfrutando visualmente de los encantos físicos de una hermosa bartender, empecé a dejar que el tiempo, con una sola cerveza, pasara y pasara.  Por consumo no era el mejor cliente pero me soportaban.  Justo a mi lado se sentó un hombre de buen aspecto y vestir. El personaje me preguntó si podía invitarme una bebida.  Le dije- no, gracias- no bebo. Viendo mi cerveza  mostró sorpresa por mi respuesta.  Le exclamé: perdoné no es por descortesía, sólo vine a distraerme un rato.  

Yo también vengo a desahogarme a dejar el estrés, replicó el desconocido.  Luego, procedió a presentarse. Todo siguió normalmente. Hablamos de fútbol, la crisis financiera, el calentamiento global. Después de su cuarta o quinta copa y de mi aún primera cerveza, sacó una foto de su gata Mini y me dijo que era el amor de su vida. Me interrogó sobre el mío. Le mostré la foto de mi hija Valeria. Y empezando a inquietarme un poco, le aseguré que tenía también un enorme perro pastor alemán y que se llamaba Nerón. Se lo dije hasta con voz gruesa, enviándole cierto mensaje.  No aguantó y  le dio por hacerme la famosa pregunta… ¿porqué alguien como tú, que no es un galán pero tampoco un galón, que eres así, asa, etc… estás solo un viernes en una barra?  Me hizo una miradita algo rara. El tono de voz le cambió.  Le contesté  con firmeza pero sin altanería, que yo era solterón pero aquello no.

Aclarado el asunto el hombre se disculpó. Confirmó que era gay y luego me preguntó si eso me impedía proseguir con la  charla en la barra, que en la mayoría de los temas fue muy interesante y  divertida.  ¡Claro! Por mi no hay problema. Respeto a la gente gay. Al ser humano en general. Uno de los mandamientos me invita a amar al prójimo como a mí mismo... ¡Bueno..! eso de amar es obvio que se refiere al aprecio en Cristo que debemos ternernos unos a otros. En términos de amistad la preferencia sexual no me interesa, le exclamé.  Pude entender que el nuevo amigo hizo lo que muchas personas, solteras y solteros, siempre hacemos, tirar el anzuelo para ver que atrapamos.

Y ahí comenzó a relucir una de las respuestas o causas de mi soltería, una constante coquetería que por mucho tiempo me ha impedido ser fiel. Y la fidelidad es sin duda una fuerte base, aunque no garantía, para una relación estable.  Como el agua entre los dedos, el amor se ha escurrido de mí, por esa fama de mujeriego que yo mismo  establecí. 

Puedo estar ahora poniendo una soga en mi cuello con esta nota. Pero vale la pena reconocer, que muchos estamos solos por culpa de nuestro propio proceder. He desilusionado y he causado  dolor también, bueno y viceversa, pero  nunca he jurado amor eterno para conseguir de una dama el polémico placer.

Mentiría si afirmó que me siento feliz soltero. No obstante, sí debo reconocer, que estoy lejos del infierno en el que viven muchas parejas, unidas únicamente por el temor a la soledad.

Mi hija tiene ahora once años de edad, y desde los nueve me dijo: Papi yo te dejo tener novia, sin hacerle la vida imposible, si te la consigues a lo bien. ¿A lo bien?- y cómo es eso, le pregunté. Mi princesa respondió: es decir papito, que te acepto una novia que hallas conocido mirándola primero a los ojos y no primero por detrás o al pecho. ¡Upssss! Me la puso bien difícil mi hija, pero ella, en su aún corta vida, ya sabe lo que yo mucho más viejo ignoraba. El amor no es sólo pasión sexual, ni los ojos la única puerta por la que pueda entrar.  El amor es fuente de Creación Divina y  como tal se debe tratar.

Si usted amiga o amigo lector tienen una pareja estable por amor, por favor, no caigan en la rutina. No espere llegar a casa para encontrar ahí a una cocina con senos. No piense que el que llegará a cenar es sólo una masa de carne ardiente. Mímense de nuevo, coquetéense, susúrrense al oído esos te quiero que parecen ausentes. El amor no sólo se hace, se dice, se demuestra, se siente.  Ya sé que mientras esto leen, algunos dirán que con qué autoridad este solterón consejos dá.  Pues compadre o comadre, si no quieren terminar en la lista de solteros, de divorciados, de solitarios, agarren lo que tienen con el corazón.

Y para mis colegas en aburrida soltería sería bueno indagar la causa de ese padecer.  Si eres homosexual, pues pilas, deja en el closet sólo tu ropa y vive la vida como te toca. Quizás conozcas a mi amigo de barra y a su gata Mini, y juntos logren vidas felices.  Ahora, si eres un solitario heterosexual como yo, quizás nos toque modificar muchas cosas de nuestra machista actitud, y empezar a ver el amor también de frente y no sólo por… en fin.  ¡Ah! se me olvidaba… damas entre 30 y 100 años de edad, que busquen relación estable por amor y no por soledad, si reciben aplicaciones con la mía pueden contar.


jueves, 2 de julio de 2009

Cada pie con su zapato... cada quien con sus experiencias"

 Gracias por los mensajes enviados a mi correo electrónico (susurro12@hotmail.com).  Las columnas de “Susurro” que he escrito compartiendo experiencias muy especiales  de mi vida, de algunos conocidos y desconocidos,  han sembrado en la mayoría de los casos una  pequeña semilla de fe y positivismo, o al menos  han logrado entretener un ratico . Me es muy difícil responder  con prontitud  a cada uno de los e-mails  pero poco a poco voy contestando. Sin embargo en esta ocasión he brincado el turno para responderle  a un lector  que me pidió que me colocara sus zapatos.

“Apreciado señor  Susurro  o periodista Javier Suárez,  mi hermana es feliz leyendo sus artículos.  El que más le ha gustado o que según ella le ayudó mucho, es el que se llamó ´Una Piedra de Gratitud´.  Me dijo que era cierto, que  yo especialmente había olvidado dar gracias por las cosas buenas y que sólo me la pasaba quejándome, lamentándome y hablando de las cosas malas, de mi desempleo, de mi soledad, de mi dolor de espalda.  No es su culpa  suya señor  Susurro que mi hermana utilice sus notas para atacarme, pero al escribir usted debería ser más realista. Usted escribe muy bonito y quizás hable así también.  Pero es fácil ser positivo cuando se es un buey que  trabaja sentado desde un escritorio, que usa ropa bonita  y limpia, que recibe un buen salario cada semana (…) póngase usted en mis zapatos”.

Apreciado lector , yo calzo No9  espero que usted también.  Sinembargo, aunque calcemos igual , de seguro caminamos diferente.  Le ruego que analice primero si su hermana lo atacó o simplemente le invitó a cambiar de actitud. Estoy seguro que ella  está  triste por su grave situación personal y laboral. De la misma forma parece estar cansada de escuchar  lo mismo siempre de usted.  Yo también aburrí a los míos  no hace mucho tiempo atrás. Yo también pensé que si alguien hablaba cosas positivas de la vida, ese alguien tenía que ser  un “Hijo de Tuta” como dice la canción.  Aunque yo use un escritorio y un computador  como herramientas de trabajo no significa que me gane un sueldo de ejecutivo de Wall Street, y en las condiciones actuales en que está la economía  global hasta ellos empiezan a quejarse.  Conozco gente con mucho dinero, con zapatos finos,  pero que emocionalmente están derrumbados, viven en la amargura, paranóicos, tacaños y conozco también a personas  muy espirituales que mantienen enfermas , con los zapatos rotos y sin un dolar en el bolsillo. 

Creo que la falla ha estado en que nos han educado para sufrir. Cuando chico escuché decir que era más fácil que un camello pasará por el ojo de una aguja que un rico entrar al cielo. Así crecí con la mentalidad de que el dinero era parte del pecado y que sólo los deshonestos eran millonarios. Y como casos parecidos a esos es lo que más se ve en las noticias,  terminé  observando la  espina de la rosa, creyendo que los petalos eran fantasía.

 

De la misma manera escuché que había que cargar nuestra propia cruz y seguir a Cristo, y me hicieron pensar que mi vida entonces sería una ruta  infinita hacia un eterno calvario.  !Caramba!  me aburrí  de aburrir. Me cansé de ser pesimista y decidí también seguir a Jesús incluso hasta la resurrección. Hoy estoy viviendo de nuevo, aveces con los mismos problemas pero con una fe renovada que me hace sentir mucha fuerza.  Ahora utilizo mi mente para imaginarme próspero en todo aspecto, en vez de pensar que nací para estar jodido  todo el tiempo y usar unicamente zapatos que me apreten.

Amigo lector, yo bendigo la empresa en la que trabajo y aquí no todos tienen escritorio pero están agradecidos por  laborar en una entidad que genera el sustento de muchas familias. Aquí  adentro las cosas no han sido fáciles y hubo un tiempo en el que creía que trabajaba en el infierno por las discordias con dos o tres compañeros.  Cuando me enfoqué en ver las cosas buenas que tienen mis jefes, la empresa,  e incluso las cosas positivas de esas dos o tres  enemistades, he creado un ambiente laboral para mí  más tranquilo. Estuve desempleado mucho tiempo. Como asistente de enfermería que fuí, limpié el trasero de varios pacientes con diarrea, cosa que nunca hice ni con mi hija cuando estaba recién nacida.  En Colombia viví como un príncipe periodista por muchos años y aquí  he sido taxista, ayudante de cocina, hasta conejillo de indias en la prueba de un medicamento contra la fiebre.  Cada unos de esos oficios  me han mostrado etapas que he había calificado de tristes para mí, pero que hoy han sido un peldaño importante de mi escalera. 

Cada vez más  creo en la fuerza de la ley de la atracción. Lo que en nuestra mente duerme en nuestra realidad despierta. Somos lo que pensamos. Somos lo que sentimos. Somos lo que decimos. Si pensamos  unicamente en el desempleo, en el hambre, en la pobreza, en la soledad, en la venganza, en la erfermedad, eso será lo único que obtendremos. Suena absurdo  que uno pueda pensar en riqueza cuando no se tiene ni siquiera un empleo. Pero la mayor parte de los milagros, incluso los de Jesús eran también jusgados negativamente, y  siguen siéndolo aún por creyentes. Estoy seguro mi amigo lector que mientras me escribías tu e-mail  tenías una imagen de la virgen de Guadalupe en tu pecho. Si no ponemos en marcha el motor de la fe, permaneceremos estacionados en la incertidumbre e incredulidad. Si te sientes  enfermo y hablas a toda hora de tu enfermedad, muy complicado está que te alientes. Si estás esperando que una bella chica te diga que eres guapo, para entonces subir tu autoestima, podrías tardar tiempo en reconocer que sos la parte mas importante de la Creación y por ende, atractiva por derecho propio.  Y si lo único que haces es hablar y hablar de los zapatos que te apretan,  podrías terminar más solo de lo que te sientes ahora.  Yo no te ataqué, tu hermana tampoco. Ella te ama por sangre, yo te apreció por  vocación. No me pidas que me ponga tus zapatos, empieza a fabricar  tu propio calzado, uno mucho más cómodo. !Ah! y no dejes de escribirme.

miércoles, 1 de julio de 2009

"Mi funeral... gracias por venir"



















Qué frío hace! Mi piel palidece. Estoy despierto pero sigo dormido. Recuerdo que me acosté dando gracias a Dios por el día que había transcurrido. En la noche respiré. Al amanecer expiré.
Quiero levantarme y gritar con entusiasmo buenos días vida, buenos días sol, buenos días universo, buenos días Jesús. Quiero darle a mi hija el abrazo que aplacé para mañana. Quiero decirle a mi madre lo que quería decirle hasta el próximo día de las madres, que la admiro, que la amo… pero no puedo hablar, no me puedo mover. No me sienten, no me escuchan. De 65 latidos por minuto, mi corazón pasó a cero. Por los casi 96 mil kilómetros de mi activo sistema circulatorio ya no navega mi sangre.
Todo es confuso. Mi madre llora. Mi hija le pregunta ¿qué pasa abuela, porqué papito no despierta? En familia habíamos hablado de la muerte y también de la vida eterna. Por el momento nada se recuerda. El dolor invade. La tristeza gobierna.
¡Upsss! De una cama amplia a una caja angosta. Qué frío sigue haciendo. Estoy en una habitación que no es de mi casa. ¡Ah! ya sé dónde me encuentro. Vine aquí al funeral de la tía de un amigo. Y ahora estoy en el mío. ¡Qué frío hace!
Una vez fui parte de las estadísticas de nacimientos. Ahora estoy en la lista de fallecimientos. Según la Oficina del Censo de los Estados Unidos, aproximadamente 108 personas mueren cada minuto en todo el mundo. 6 mil 464 cada hora. Hoy fue mi turno, bueno y el de otros 155 mil 131 hermanos que dejan de respirar cada día.
Mi madre y mi hija siguen llorando pero también están orando. Las escucho decir que estoy en el cielo. Leen un versículo de la Biblia: Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí (Juan 14:6). Ellas saben que en Cristo sigo vivo y el pastor Pablo Flórez se los recuerda.
¡Vaya! El planeta entero se enteró y lamentó la muerte de Michael Jackson. La mía, casi a nadie parece interesarle. De los 6 mil millones 500 mil habitantes que tiene la tierra, sólo 30 están en mi funeral. No, menos, cinco se han equivocado de funeraria.
Sí, sí, ya sé. Ya sé que yo era buena gente, inteligente, atractivo, un padre ejemplar, un excelente periodista, buen amante, en fin… ¿Será que alguien se atreve a hablar mal de un muerto? Qué lindo fue haber escuchado en vida las nobles críticas de seres no amargados, mucho más que tantos elogios que cerca de mi ataúd algunos hipócritas están susurrando.
Miren quién se asomó a mi féretro a verme, ¡huy! mi hermosa vecina, si en vida le hubiese visto ese escote, de tentación habría muerto. Ahí viene otro. Huele a fino tabaco, es mi jefe, se libró de mi aumento. Espero que su empresa siga creciendo y generando más trabajos.
¿Quién es el próximo en acercarse? ¡Hey! Y este personaje qué hace aquí si yo le caía muy mal. Me gustaría hacerle una mueca para dejarlo bien frío como estoy ahora.- No, no mentiras- a Dios di gracias siempre por el pan nuestro de cada día, por perdonar mis ofensas y permitirme perdonar a quienes me ofenden. Creo que en ese aspecto pude morir en paz.
Algo sucede, escuchó llantos diferentes. Otro muertico para las estadísticas ha llegado a la sala de al lado. ¿Serás tú? Espero que hallas tenido tiempo de decir esos “te quiero” que callaste por tantos años. Ojalá con amor hubieses logrado contemplar, en los últimos instantes de tu existencia, la Divina Creación que en la vida nos rodea. No te preocupes por la mucha o poca cantidad de personas que vengan a velarte, de nada sirve lo que ahora digan, lo que vale es el cómo actuaste. En fin… no me metí en la vida de ningún vivo menos ahora en la de un muerto. Descansa como yo en paz y que brille para nosotros la luz perpetua… ¿Luz perpetua?-¿ Será eso lo que destella? Creo que estoy cruzando ya por el famoso túnel. ¡Jajajaja! Es la luz de la bombilla. Mi hija se levantó para ir al baño. El frío que tenía era por el aire acondicionado. Estoy vivo, estaba soñando. De todos modos gracias por venir a mi funeral.