Periodista Javier Suárez, testigo del encanto ecológico y cafetero de Santuario en Risaralda Colombia. Visita a la destacada región turística y templo del café suave. |
Por Javier Suárez
Era una hora cualquiera, de un mes cualquiera, pero la experiencia que les voy a describir no es cualquier cosa. Es especial, suave, inolvidable y exquisita. ¡Oh Dios! Se me hace agua la boca, mi olfato se inquieta y se me dilata el paladar al recordar. Un delicioso aroma atrapó mis sentidos. Olía a café. No quería dejar de inhalar tan mágico aroma. Una y otra vez inspiraba con placer. No aguanté más y pedí una taza caliente de ese producto. Si su sabor es como su aroma, habré probado entonces el café perfecto... Susurré.
¡Ufff! El primer sorbo hizo
estallar el placer en mi boca y ese gusto quedó impregnado en mi
paladar por largo rato. Y así fue en el segundo, tercero y en cada
sorbo eterno de tan suave bebida. Por mi lengua y hasta la garganta
se desplazó con su sabor el cuerpo de aquel líquido invadiendo de
alegría mi sentido gustativo. Y el placer continuaba. Una chispa
ligeramente picante que sentí en mi lengua me hizo estremecer por un
instante. Creo que es lo que llaman los expertos la acidez del café,
uno de los atributos más deseados de este grano. En fin, la
impresión y la experiencia fueron máximas, perfectas. Y todo
gracias a un paseo por una región de admirable historia, alucinante
geografía y cafetera por excelencia. Ahora entiendo porqué el café
colombiano es admirado por su aroma, sabor, cuerpo, acidez e
impresión global.
Todo un maravilloso espectáculo
ecológico son las montañas colombianas vestidas de cafetales. Un
cultivo perfecto que forma entre sus matas, una fascinante
combinación de calles y avenidas naturales denominadas surcos. Hay
un café que es exquisito desde su siembra hasta su consumo. Y es el
grano producido en la zona cafetera del municipio de Santuario, en el
departamento de Risaralda. Contemplar y oler sus cultivos es un
privilegio para quienes los visitan pues tan fascinante geografía es
una muestra verde de la bendición divina. Y una vez recogida la
cosecha y efectuados todos los pasos de procesamiento, el aroma
delicado de este café colombiano se une a un inolvidable sabor...
¡Hummm!. Nada como una taza de dicho y suave líquido, que frío o
caliente al paladar mundial consiente.
Pude
ver de dónde viene ese café que muchos tomamos en New York y que
otros tantos lo disfrutan en todo el mundo. El Café Suave (Mild
Coffee en inglés), es café de montaña. Lavado en finca o en
centrales de beneficio. Totalmente cosechado de forma selectiva. Se
utilizan procesos artesanales intensivos en mano de obra para su
selección. Tuve la oportunidad de observar esta parte de la
llamativa ruta cafetera y ecológica que al mismo tiempo se conjugan
en Santuario. El Paisaje
Cultural Cafetero colombiano está en la lista del Patrimonio Mundial
de la Unesco, organismos que reconoce la belleza y la prosperidad de
estas regiones del país andino.
Gracias a la familia Castaño
Calderón, anfitriones de mi recorrido, pude experimentar el universo
del café más codiciado del mundo. Gustavo Adolfo Castaño Calderón
un joven profesional y naciente caficultor de Santuario guío mis
pasos por los cafetales de la pequeña pero inmensamente acogedora y
colorida finca familiar. Una de las tantas parcelas que día a día
buscan conquistar unidas un espacio más el mercado global del café
y que en conjunto le regalan al mundo un escenario ecológico
espectacular en el que se reúnen los encantos de majestuosos parques
naturales como el Tatamá (Abuelo de los ríos) junto al pasado,
presente y futuro del más suave y exquisito aroma, el que sólo se
halla en el Santuario del café colombiano.
Artículo publicado en el periódico Personalidades que circula en Nueva York y Nueva Jersey ( Estados Unidos).. Edición No 116.. julio del 2012. |
Gustavo Adolfo Castaño Calderón un
joven profesional y naciente caficultor de Santuario guío mis pasos
por los cafetales de la finca familiar.
Santuario, cuna del café ecológico más suave del mundo. |
Cerca de 16 mil habitantes conforman la
población de la arquitectónica mente colonial localizada de
Santuario.
4a.Santuario mediana
Santuario se distingue por la variedad
de climas y pisos térmicos aptos para el desarrollo de la economía.
Se llega a ella desde la capital de Risaralda, Pereira, por medio de
una vía pavimentada llena de extraordinarios paisajes que brindan al
recorrerlos una inolvidable aventura turística, comercial y
ecológica.
Tatamá..
La presencia de un páramo virgen y el
excelente estado de conservación en que se encuentra, convierten
al Parque Natural Tatamá en un área protegida de alto
interés científico y un refugio natural intacto para muchas
especies vegetales y animales. El parque se destaca en la Cordillera
Occidental por el excelente estado de conservación de sus
ecosistemas